SunDreams vuelve a la carga contra Enjoy en disputa por casino de Pucón

La batalla griega por la concesión del casino de Pucón parecía acabarse después de que la Corte Suprema desestimara una queja interpuesta por SunDreams en contra de la Superintendencia de Casinos y Juegos (SCJ), tras dar por ganador de la licitación a Enjoy.

Esto, porque acusaba que el proyecto de la operadora de casinos ligada a la familia Martínez incumplía normas de ubicación y aún así se le había adjudicado la operación por 15 años.

Tras el triunfo en la Suprema en noviembre -que incluyó un respaldo del juez Sergio Muñoz al tema de fondo en disputa-, la empresa presentó modificaciones a la propuesta, realizando una serie de cambios relevantes al proyecto original, los que fueron aprobados por el Consejo Resolutivo de la SCJ. Esto fue oficializado hace unos días, extendiendo el plazo para tener además las obras listas, para junio de 2021 en una primera fase.

Fue ese acto administrativo el que motivó a la chileno-sudafricana SunDreams a ir contra la autoridad ante la Corte de Apelaciones -lo que ya fue declarado admisible-, acusando una ilegalidad del acto, dada la magnitud de las modificaciones que -acusa- implican una construcción totalmente diferente a la que logró adjudicarse la licitación.

La trastienda

El 25 de septiembre de 2019, Enjoy presentó a la autoridad los cambios al proyecto original de licitación, los que fueron evaluados el 26 de diciembre por el Consejo Resolutivo.

A pesar de que finalmente fueron aprobados con unanimidad, el presidente del consejo, Francisco Moreno, comentó durante la cita que la modificación del lugar donde se iba a construir el casino "podría implicar un cambio esencial desde el punto de vista jurídico como del proceso de licitación", se constata en el acta.

Esto, porque el lugar del casino ahora estará en el sector donde se ubicaban anteriormente los estacionamientos, entre las calles Pedro de Valdivia, Palguin, Holzapfel y Miguel Ansorena; un nuevo nivel subterráneo para ubicar 120 estacionamientos, que significa un aumento neto de 3.950 m2 al complejo inicial; la incorporación de un gimnasio y la remodelación al hotel, entre otros.

Según detalla el acta de la sesión, "todos estos cambios resultarán en un aumento de 1.153 m2 en la superficie total de planta del proyecto".

Moreno indicó en la reunión que le era de "máxima relevancia tener claridad a si el cambio podría ser considerado legalmente como otro proyecto, en vista de que se trata de un cambio a todas luces relevante".

También se señala que el jefe de la División Jurídica de la SCJ, Manuel Zárate, indica que "podría haber impugnaciones de los actos que se generen a partir de la decisión del consejo", tras un análisis de riesgo legal.

Consultada la SCJ por la nueva acción de SunDreams en la Corte de Apelaciones de Santiago, dice que "en consideración a que existe un reclamo de ilegalidad interpuesto por Casino de Juegos Pucón, no corresponde formular comentarios, atendido a que sólo una vez que sea notificada la Superintendencia de Casinos de Juego, formulará sus descargos y alegaciones exclusivamente ante dicho tribunal de alzada".

El problema para Enjoy no sólo radica en las diferencias con SunDreams, sino que tiene hasta fines del próximo año para tener construido el proyecto -luego que recientemente le aprobaran una prórroga- y aún no ha iniciado las obras.

La firma de los Martínez tiene entregadas boletas de garantía que suman aproximadamente unos US$ 13,6 millones, las que se podrían activar de no cumplir los plazos comprometidos.

Algo que podría jugarle en contra, dado el momento delicado en que se encuentra desde el punto de vista financiero.

En Enjoy dicen que están avanzando en el proceso. "El anteproyecto correspondiente fue aprobado por la Dirección de Obras Municipales de Pucón el viernes recién pasado. Los permisos de excavación y edificación fueron recientemente presentados y estamos a la espera de su aprobación para dar inicio a las obras", indicaron.

Tras consultar vía pertinencia si el proyecto debe ingresar a evaluación ambiental, el Servicio de Evaluaciób Ambiental respondió el 21 de febrero que están obligados, lo que pone aún más presión para cumplir los plazos, ya que este proceso puede durar alrededor de ocho meses.